Un jard&iacute;n urbano que reconecta la comunidad con la naturaleza.

Con el t&eacute;rmino franc&eacute;s d&eacute;j&agrave; vu&nbsp;se describe la sensaci&oacute;n de haber experimentado previamente una situaci&oacute;n que, sin embargo, se vive por primera vez. &iquest;Pero c&oacute;mo definir la impresi&oacute;n contraria &mdash;es decir, observar lo cotidiano como algo extraordinario y nuevo&mdash; con una expresi&oacute;n similar?
Surge as&iacute; un nuevo t&eacute;rmino, &laquo;vuja de&raquo;, que viene a definir este acto revolucionario que consiste en transformar lo familiar en un fen&oacute;meno in&eacute;dito, inexplorado y sorprendente. Uno de sus mejores ejemplos es, sin duda, El Terreno, un jard&iacute;n que se experimenta y se vive con la singularidad de una nueva mirada.
Entre el ruido de la Ciudad de M&eacute;xico, dentro de muros de piedra, surge un pabell&oacute;n rodeado de flores y plantas arom&aacute;ticas que crecen sobre la base del poder colectivo. &laquo;La transformaci&oacute;n de un vertedero ilegal de basura en un proceso de regeneraci&oacute;n&raquo;, nos comparte Michelle Kalach, quien trabaj&oacute; con Vertebral para construir con materiales reciclados un lugar destinado a la educaci&oacute;n ambiental.

Con una larga historia de amor por la permacultura &mdash;arte de dise&ntilde;ar espacios de vida basados en las caracter&iacute;sticas del ecosistema natural&mdash;, el cierre de las escuelas debido a la pandemia la impuls&oacute; para crear este proyecto. Su objetivo era reconectar con la naturaleza a trav&eacute;s del cultivo de la flora y fauna end&eacute;mica que alguna vez habit&oacute; este espacio.
Una met&aacute;fora de la resiliencia que florece de manera natural cuando se nutre desde el respeto a la Tierra como la &uacute;nica posibilidad de un futuro. Para Kalach, el amor hacia el medio ambiente se traduce en amor propio. El Terreno, a&ntilde;ade, revela que la sostenibilidad no tiene por qu&eacute; ir de la mano del lujo, sino que puede ser tambi&eacute;n una herramienta de la propia comunidad para conectar con sus or&iacute;genes y construir un futuro mejor, m&aacute;s respetuoso.

SR: Est&aacute;s profundamente involucrada con la eduaci&oacute;n ambiental &iquest;Cu&aacute;l es la historia detr&aacute;s de esta pasi&oacute;n?
MK: Mi amor por la naturaleza y los animales empieza a los ocho a&ntilde;os, gracias a que una maestra del colegio nos invita a investigar acerca de los productos que tratan en animales de laboratorio. Despu&eacute;s de ese d&iacute;a me enfoque en estudiar acerca del impacto que tenemos como humanos en nuestro planeta. Mis proyectos escolares siempre fueron en torno al medio ambiente. Despu&eacute;s de graduarme de Preparatoria me fui unos meses a una ecoaldea en Israel llamada &laquo;Hava ve Adam&raquo; a vivir una vida comunitaria en la naturaleza y aprender de permacultura. A partir del 2014 empec&eacute; a cultivar este sue&ntilde;o de crecer mi propio alimento, impulsar la educaci&oacute;n ambiental y crear una comunidad consciente. Es as&iacute; como nace El Terreno en el 2020 junto con mi hermano Elias Kalach de Vertebral.&nbsp;
&iquest;C&oacute;mo fue el proceso de formar parte del dise&ntilde;o y la construcci&oacute;n del jard&iacute;n?
MK: Fue muy interesante trabajar junto con Vertebral. Creo que este proyecto es un claro ejemplo de c&oacute;mo la arquitectura y la sustentabilidad pueden coexistir y ofrecer un dise&ntilde;o funcional y est&eacute;tico. Durante el proceso de dise&ntilde;o y construcci&oacute;n nos aseguramos de utilizar materiales reciclados y locales as&iacute; como un dise&ntilde;o que incluya paneles solares, captaci&oacute;n y tratamiento de agua pluvial y un ba&ntilde;o seco. Fue muy ben&eacute;fico trabajar juntos porque pudimos aprender y desarrollar conceptos que aseguran un proyecto social y ambientalmente responsable a corto, mediano y largo plazo.
&iquest;Cu&aacute;les son los puntos clave para adoptar aquel compromiso de cultivar un entorno curativo a trav&eacute;s de una producci&oacute;n regenerativa? &iquest;Cu&aacute;l es el mayor reto?
MK: En mi opini&oacute;n el punto m&aacute;s importante para cultivar este tipo de entornos es reconocer la importancia que tiene la naturaleza en nuestra vida y desarrollar un amor y entendimiento por esta. El entender que somos parte de la naturaleza y no algo separado de ella nos acerca m&aacute;s a un estilo de vida con consciencia y respeto. No podemos dejar a un lado lo que es la educaci&oacute;n ambiental como un punto elemental ya que gracias a esto podemos llegar a desarrollar habilidades y herramientas para poder aterrizar proyectos y contribuir a una econom&iacute;a circular. El reto m&aacute;s grande es romper con la idea de que para lograr un estilo de vida sostenible y un desarrollo econ&oacute;mico debemos sacrificar placeres y gustos. Podemos tener una vida plena cuidando nuestro ambiente. Tambi&eacute;n el reto est&aacute; en la resistencia colectiva que existe en modificar algunos de nuestros h&aacute;bitos para vivir en armon&iacute;a con otras comunidades y seres vivos.&nbsp;
&iquest;C&oacute;mo visualizas el futuro de El Terreno?
MK: Nos gustar&iacute;a poder incentivar a m&aacute;s personas a crecer sus propias hierbas, flores o alimento en la ciudad ya sea en macetas, techos, jardines o cualquier espacio que tengan a su disposici&oacute;n. Tambi&eacute;n nos gustar&iacute;a contagiar el amor por la naturaleza a trav&eacute;s de talleres, pl&aacute;ticas y eventos en nuestro espacio, en empresas y colegios. Buscamos generar un cambio en las vidas de las personas para promover el bienestar mental y f&iacute;sico de cada uno de nosotros. Creemos que El Terreno viene siendo un espacio que ejemplifica las diferentes soluciones que tenemos a nuestra disposici&oacute;n para abordar la crisis clim&aacute;tica que estamos viviendo. Ya sea a trav&eacute;s del cultivo org&aacute;nico, la composta de materia org&aacute;nica, la captaci&oacute;n de agua pluvial, el uso de energ&iacute;a renovable, la alimentaci&oacute;n a base de plantas o cualquier otra soluci&oacute;n que mejore nuestras vidas y construya un futuro m&aacute;s incluyente y seguro para todos. Buscamos ser un ejemplo y medio de comunicaci&oacute;n y herramientas para generar cambios positivos en nuestro alrededor.

El Terreno: donde arquitectura y sostenibilidad coexisten

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